Finas
tapas salen del horno para abrazar delicioso manjar blanco
SAYÁN AGASAJA A LOS TURISTAS
CON SUS IRRESISTIBLES ALFAJORES ELABORADOS DESDE FINES DEL SIGLO XIX
Con mucho ingenio y buen gusto, desde fines del siglo XIX
los alfajores le dieron fama al distrito de Sayán (provincia de Huaura) que
agasaja a los turistas con tan preciado dulce.
Reconocida heredera de la tradición es doña Santos Grados,
quien elabora las finas tapas que abrazan un inigualable manjar blanco y cuya
receta casera se puede disfrutar en Dulces Lumbre, frente a la plaza de Armas
de la localidad, dejando extasiados a los periodistas de la revista turística
Rumbos del diario La República.
Para los lugareños resulta habitual que los viajeros camino
a Churín (provincia de Oyón) se detengan en la Tierra del Sol para saborear las
pecanas bañadas en manjar blanco, alfajores, naranjas rellenas, melocotón y
guindones. Una tradición que viene de generación en generación desde que Dulces
Lumbre abrió sus puertas el 7 de enero de 1904.
La preparación es ciento por ciento artesanal y la
presentación conserva la misma sencillez de sus modestos inicios, a pesar de la
fama. Los dueños han rechazado muchas ofertas para vender sus productos en Lima
y otras ciudades del Perú. La idea es mantener la irresistible receta original
y la calidad que la caracteriza.
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